Nuestras Creencias

Aquí no vas a encontrar un tratado de teología sistemática sino apenas un compendio de lo que nos parece son las creencias esenciales del cristianismo tal como entendemos que la Biblia nos enseña. Antes de mencionar las enseñanzas queremos transmitirte un principio rector que intentamos seguir:

• «En las creencias esenciales, tenemos unidad.»
• «En las creencias no esenciales, tenemos libertad.»
• «En todas nuestras creencias siempre mostramos amor.»

Creemos que, como dijo el apóstol Pablo, permanecen la fe, la esperanza y el amor, pero el más importante de ellos es el amor. Por esto es que ante una diferencia siempre lo tratamos con amor. A continuación, te compartimos cuáles son nuestras creencias esenciales:

1. Acerca de Dios.

Algunos versículos a considerar: Génesis 1:1, 26, 27; Génesis 3:22; Salmo 90:2; Mateo 28:19; 2Corintios 13:14; 1Pedro 1:2. Creemos acerca de Dios que es el creador y gobernador del Universo. Creemos que ha existido eternamente. Creemos que existe como tres personas: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Estos tres son iguales y son un solo Dios.

2. Acerca de Jesucristo.

Algunos versículos a considerar: Isaías 9:6; Mateo 1:22-23; Juan 1:1-5; Juan 14:10-30; Hechos 1:9-11; Romanos 1:3-4; 1Corintios 15:3-4; 1Timoteo 6:14-15; Tito 2:13; Hebreos 4:14-15. Creemos acerca de Jesucristo que es el Hijo de Dios, y que es igual y uno con Dios Padre y con Dios Espíritu Santo. Creemos que a lo largo de su vida en la tierra fue completamente Dios y completamente humano. Creemos que Jesús vivió una vida humana perfecta y sin pecado. Creemos que se ofreció a sí mismo al morir en la cruz como el sacrificio único y perfecto por los pecados del mundo. Creemos que resucitó de entre los muertos para demostrar su poder sobre el pecado y la muerte, y hacernos coherederos de la vida eterna. Creemos que ascendió al cielo y que volverá para reinar como el «Rey de reyes y Señor de Señores».

3. Acerca del Espíritu Santo.

Algunos versículos a considerar: 2Corintios 3:17; Juan 16:7-13; Juan 14:16-17; Hechos 1:8; 1Corintios 3:16; Efesios 1:13; Gálatas 5:25; Efesios 5:18. Creemos acerca del Espíritu Santo que es igual con el Padre y con el Hijo. Creemos que está presente en el mundo y que opera en las personas para hacerlas conscientes de su necesidad de salvación en Cristo Jesús. Creemos que está para convencer a las personas de pecado, de justicia y de juicio. Creemos que ingresa en cada creyente en el momento de la salvación y que permanece toda su vida siendo la fuente de poder para la vida, para el ministerio y para el crecimiento espiritual. Creemos que provee al cristiano de entendimiento para vivir, entendimiento de las verdades espirituales y dirección hacia lo que es correcto. Creemos que da a cada creyente dones espirituales. Creemos que, como cristianos, debemos aprender a vivir diariamente bajo su control.

4. Acerca de la Biblia.

Algunos versículos a considerar: 2Timoteo 3:16; 2Pedro 1:20-21; 2Timoteo 1:13; Salmo 119:105, 160; Salmo 12:6; Proverbios 30:5. Creemos acerca de la Biblia que es la Palabra de Dios para nosotros. Creemos que fue escrita por autores humanos inspirados sobrenaturalmente por el Espíritu Santo. Creemos que es el recurso supremo de verdad para la creencia y la vida cristiana. Creemos que la Biblia es la carta de amor de Dios para la humanidad y que relata la historia de la salvación. Creemos que la Palabra de Dios es poderosa y que permanecerá para siempre.

5. Acerca del Ser Humano.

Algunos versículos a considerar: Génesis 2:17; Salmo 8:3-6; Isaías 53:6a; Romanos 3:23; Isaías 59:1-2. Creemos acerca del Ser Humano que está hecho a imagen de Dios. Creemos que el hombre y la mujer son la obra máxima de la creación de Dios. Creemos que, aunque la humanidad tiene tremendo potencial para el bien, está manchada por la tendencia de desobedecer a Dios: a la desobediencia la llamamos pecado. Creemos que el pecado separa a las personas de Dios, y le impide establecer una relación personal con el Creador y con sus semejantes. Creemos que el pecado causa muchos problemas en la vida y que es necesario que el hombre se arrepienta, reconozca su pecado y cambie. Creemos que recibiendo a Jesucristo como su único y suficiente Salvador personal es la manera de empezar a restablecer la relación con Dios y con sus pares. Creemos que por medio de Jesús la imagen de Dios en el ser humano es restituida.

6. Acerca de la Salvación.

Algunos versículos a considerar: Romanos 6:23; Efesios 2:8-9; Juan 14:6; Juan 1:12; Tito 3:5; Gálatas 3:26; Romanos 5:1. Creemos acerca de la Salvación que es el regalo de Dios para nosotros y que es necesario aceptarla por medio de la fe. Creemos que no podemos compensar por nuestros pecados por medio de las buenas obras o del mejoramiento personal. Creemos que solo al confiar en Jesús, arrepintiéndonos de nuestros pecados y aceptando el regalo de Dios por medio de la fe, es que podemos ser salvos de la pena del pecado. Creemos que la vida eterna y abundante empieza en el momento en que uno recibe a Cristo como el Salvador y Señor de su vida.

7. Acerca de la Seguridad Eterna.

Algunos versículos a considerar: Juan 10:29; 1Timoteo 1:12; Hebreos 7:25; Hebreos 10:10-14; 1Pedro 1:3-5; Filipenses 2:12; Gálatas 5:6. Creemos acerca de la Seguridad Eterna que el creyente está seguro en la salvación otorgada por Dios a través de Jesús por la eternidad. Creemos que la Salvación no se puede perder; no hicimos nada para ganar la salvación y no podemos hacer nada para perderla. Creemos que la Salvación nos es dada, y se mantiene por la gracia, la fidelidad y el poder de Dios. Sin embargo, creemos que no debemos olvidar que la Palabra de Dios nos anima a esforzarnos por demostrar los resultados de nuestra salvación obedeciendo al Señor con profunda reverencia y temor. Creemos en una fe que obra por amor.

8. Acerca de la Eternidad.

Algunos versículos a considerar: Juan 3:16; Juan 2:25; Juan 5:11-13; Romanos 6:23; Apocalipsis 20:15. Creemos acerca de la Eternidad que las personas, desde el momento de su creación, fueron hechas para vivir para siempre. Creemos que el cielo y el infierno son lugares reales para una existencia eterna. Creemos que la separación eterna de Dios es el infierno. El vivir en unión eterna con El, es la vida eterna en el cielo. Creemos que lo que decidamos en esta vida respecto a Jesús determinará donde pasarás la eternidad: el que rechaza a Jesús está condenado al infierno; el que lo acepta, desde ese momento hasta la eternidad estará en comunión con Dios.

9. Acerca de la Santificación.

Algunos versículos a considerar: Filipenses 4:8; Efesios 4.11-16; Colosenses 2:3, 8-9; 2Timoteo 2:15; Hebreos 5:12, 6:3; Santiago 1:5, 3:17. Creemos acerca de la Santificación que Dios nos ha separado, es decir santificado, para que crezcamos y nos parezcamos cada día más a Jesús, su Hijo. Creemos que, mediante la fe en lo que afirma la Palabra de Dios y mediante la obra transformadora del Espíritu Santo, Dios trabaja en nosotros para cambiar y moldear nuestro corazón, nuestro carácter y nuestras acciones. Creemos que el creyente crece desarrollando hábitos de madurez cristiana como, por ejemplo, congregarse con los hermanos, orar y leer la Biblia, y ofrendar de corazón y con alegría para el Señor. Creemos en la promesa que cuando lleguemos al cielo, Dios completará el proceso de hacer a cada creyente igual a Jesús.

10. Acerca del Bien y el Mal.

Algunos versículos a considerar: Génesis 2:17; Romanos 3:23; Salmo 100:5; Juan 3:19; 1Corintios 15:56; Colosenses 2:15; 1Timoteo 2:3, 4:2; 2Pedro 3:9; Romanos 8:28-29. Creemos acerca del Bien y el Mal que el mal está presente en el mundo a causa de la mala decisión que tomó el ser humano de desobedecer a Dios según el relato del jardín del Edén. Creemos que Satanás es la fuente del mal y que, por su decisión, sufrirá la separación de Dios por la eternidad. Creemos que un día Dios acabará con todo el mal y que actualmente lo permite en el mundo porque es el resultado de haberle dado a la humanidad la oportunidad de elegir. Creemos que, gracias al Señor Jesús y a la obra del Espíritu en nuestras vidas, tenemos la oportunidad de elegir el bien por sobre el mal. Creemos que Dios podría eliminar automática e inmediatamente el mal, pero soporta el sufrimiento de la espera para otorgar a más personas la posibilidad de venir a Él por la fe. Creemos que Dios puede hacer que todas las cosas, incluso las malas de este mundo, obren para bien de aquellos que lo aman.

11. Acerca de la Segunda Venida.

Algunos versículos a considerar: Mateo 16:27, 18:8-9, 24:27-44; Marcos 8:38; 9:43-48; Lucas 12:40-43; 16:19-26; 21:27-28; Juan 14:1-3; Hechos 1:11; 17:31; Romanos 14:10; 1Corintios 4.5; 2Corintios 5:10; Filipenses 3:20; Apocalipsis 1:18, 3:11, 20:1, 22:13. Creemos acerca de la Segunda Venida que, a su tiempo y a su manera, Dios llevará a la tierra a un final apropiado. Creemos que, según su promesa, Jesucristo regresará a la tierra en gloria, en persona y en forma visible para todos. Creemos que los muertos resucitarán y que los creyentes iremos con Él. Creemos que Cristo juzgará a todos los hombres con justicia. Creemos que tenemos que esperar con ansias su regreso y que su inminente llegada nos debe motivar a anunciar a otros la salvación en Cristo.

12. Acerca de la Iglesia.

Algunos versículos a considerar: Mateo 16:15; 18:15-20; Hechos 2:41-42; 5:11-14; 6:3-6; 13:1-3; 14:23-27; 20:28; Romanos 1:7; 1Corintios 1:2; 3:16; 5:4; Efesios 1:22-23; 2:19-22; 3:8; Filipenses 1:1; Colosenses 1:18; 1Timoteo 2:9-14; Hebreos 11:39-40; Apocalipsis 2:3; 21:2-3. Creemos acerca de la Iglesia que es el Cuerpo de Cristo: el Nuevo Testamento menciona que la Iglesia es un cuerpo integrado por todos los creyentes y que la cabeza es Cristo. Creemos que los propósitos de la Iglesia son la adoración, el evangelismo, la comunión, el discipulado y el servicio a los demás. Nuestras Prácticas: Las creencias no tienen relevancia sobre nuestras vidas a menos que sean transformadas en acciones. Basados en lo que la Biblia enseña, en «Jesús, Rey de Paz» sostenemos y deseamos poner en práctica nuestros principios siguiendo estos lineamientos.

1. La Biblia es nuestra única norma de fe y de práctica, y es la fuente de toda autoridad.
2. Cada iglesia es autónoma. La congregación toma las decisiones sobre la vida de la iglesia local.
3. Todos los creyentes, hombres y mujeres, somos ministros y siervos del Señor.
4. Damos, alegre y voluntariamente, nuestro diezmo y nuestras ofrendas al Señor y así sostenemos nuestra iglesia.
5. Siguiendo en obediencia la ordenanza de Jesús bautizamos por inmersión a aquellos creyentes que, entendiendo el mandato del Señor y el simbolismo, lo soliciten.